Ensayar, ensayar y ensayar

Ricker Silva
Ricker Silva
Published in
3 min readDec 4, 2015

--

AdobePhotoshopExpress_00e03308fd6545bfbac4ed99aaa53e71

Hace años empecé a tocar guitarra. Mi mamá me compró una cuando estaba en el colegio y tal vez por eso terminó sus días contra la cabeza de mi hermano. Años después lo intentamos de nuevo y ella la mandó reparar. Un día finalmente me sonó como yo quería y cuando gané mi primer cheque como independiente fui a comprarme una reluciente guitarra nueva.

En la universidad conocí a Luis Sánchez. Una afortunada coincidencia puso a este compositor e interprete en la facultad de ingeniería y tras algunos años hicimos algunas obras juntos. Ocasionalmente le pido que me dicte clases de guitarra y pasamos horas completas tratando de entender cómo se debe tocar el instrumento. Más allá de sacarle notas correctas, Luis se preocupa porque interpretar el instrumento sea una experiencia agradable. Lo mismo que me pasaba cuando estaba por graduarme de la universidad y tenía que crear un equipo de trabajo en mi empresa. Quería también que fuera agradable trabajar con nosotros y tal vez por eso pudimos hacer cosas asombrosas para nuestros clientes.

Una vez estábamos ensayando Lay Lady Lay de Bob Dylan con Luis. Como siempre empezamos a ensayar el acompañamiento principal, una secuencia de cuatro acordes sencillos, tratando de tomar ritmo y aprender las transiciones. Es común cometer errores, pisar mal las cuerdas, poner mal los dedos y entonces yo me detenía y volvía a empezar. Lucho me explicó que esa secuencia de practicar-equivocarse-detenerse-repetir sólo nos enseña a aprender el error y no nos permite que la canción suene bien. Así que para dominar esa secuencia de acordes, debía practicar sin detenerme, ser consciente del error pero seguir practicando continuamente.

Muchas de las prácticas ágiles de desarrollo de software como Scrum, están basadas en iteraciones continuas como cuando se practica una canción en la guitarra, hay ciertas reuniones que se repiten, ciertas cosas que se deben hacer una y otra vez hasta que el equipo apropia el proceso y mejora los resultados obtenidos. Scrum puede ser la panacea para muchos problemas del desarrollo de software, pero no es una solución inmediata. Hay que practicar, acordar entre todo el equipo los objetivos de acuerdo a las capacidades de cada momento y ejecutar los ciclos de trabajo continuamente, aprovechar los espacios para identificar problemas a tiempo y corregirlos. Como en la música, cada acorde vuelve a repetirse y es una oportunidad para hacerlo mejor.

Practicar es algo que no solo se basa en la repetición sinsentido sino en realmente aprender a hacer bien las cosas que se practican. “Los ciclos de refuerzo generan un crecimiento o colapso exponencial que continúa a ritmos incrementales” (Senge, 1994) por eso es importante, cuando se implementan practicas ágiles de desarrollo nuevas para un equipo, que haya un acompañamiento adecuadamente que oriente correctamente al equipo mientras se apropian esas nuevas prácticas. De nada sirve ensayar mil veces una canción si no hay un maestro al lado indicando como hacer bien un acorde, como pasar entre acordes continuamente para en algún momento poder hacer una impecable interpretación.

--

--

Visualización de las jóvenes y las mujeres en el sector nuclear y sus aplicaciones en Colombia